Viermes, 9 de Abril de 2010. Plaza de toros de la Real Maestranza de Sevilla. Segundo festejo de la temporada, primera novillada con picadores y primer festejo taurino de los seguidos con motivo de la Feria de Abril. Media entrada, Buen tiempo.
6 Novillos de Juan Antonio Ruiz "Espartaco", procedencia de "Los Guateles", línea Juan Pedro-Contreras, desiguales de presentación, bien presentados en general, excepto el tercero, demasiado chico, sospechosos de pitones. Mansearon en general, ante el caballo. Destacó por su calidad en la muleta, embistiendo con el morro por el suelo, el cuarto, ovacionado en el arrastre: "Zoletillo", de nombre, marcado con el número, de 470 kilos, desaprovechado por Luis Miguel Casares. Sin llegar a ese nivel dieron buen juego, siendo aprovechables, segundo, tercero y sexto. El quinto reservón, no se entregó ni en el caballo ni al torero. En general una buena novillada, desaprovechada por los toreros. Tan sólo el madrileño, Cristian Escribano se justificó al menos, sin llegar a romper, aunque tuvo detalles muy buenos, cómo el inicio por estatuarios de la faena al segundo toro, y un excepcional trincherazo que levantó a los aficionados.
LUIS MIGUEL CASARES, oro viejo y oro, estocada desprendida en la suerte contraria, Silencio; y entera caida, Silencio. Desconfiado en el primero, sin pararse, moviendose mucho, no supo aprovechar el excelente cuarto. Otra decepción mas de este diestro.
CRISTIAN ESCRIBANO, verde oliva y oro, de Getafe, que hacia su presentación en esta plaza, estocada hasta la cruz desprendida, VUELTA AL RUEDO tras leve petición de oreja; y entera un poco desprendida, con cinco descabellos, Silencio, tras DOS AVISOS.
ESAÚ FERNÁNDEZ, de Camas, Sevilla, tabaco y oro, que hacia su presentación en esta plaza, ante sus paisanos, en novillada picada (habia toreado sin caballos) estocada caida contraria, Silencio; un pichanzo y estocada corta atravesada, Palmas. Se fue llorando por no haber conseguirdo mas eco en los tendidos.Se parece mucho en la figura y en la forma de torear, principalmente con la muleta, al diestro gaditano "Jesulín de Ubríque", lo que todavia se acrentaba más con el vestido tabaco y oro; y eso creo que, en principio, le perjudica mucho mas de lo que le beneficia.
Muy bien las cuadrillas en general. Saludaron montera en mano, tras banderillear, en el segundo, "Antoñares" y Marcos Ortiz; y en el cuarto, Curro Robles y Pedro Mariscal. Se salvaron de milagro de sendos percances en el tercio de banderillas. José Antonio Muñoz "Perico", tercero de la cuadrilla de Esaú Fernández, que se cayó en la cara tras clavar el par, al salise del mismo andando de espaldas, tras el par y fue arrollado en el suelo, haciendo el astado por él, sin consecuencias; y en el díficil quinto, Jesús Alonso, a quien un pitonazo con el izquierdo le descosió la talegulla, sin mas consecuencias. Después al salir a saludar, levantaria su montera al cielo en agradecimiento a su ángel de la guarda.
Me produjo un poco de tristeza ver a un gran picador, cómo es Antonio Saavedra, tantos años en la cuadrilla de Enrique Ponce, mas de veinte, haciendo la suerte de varas en una novillada, a las órdenes de Casares. Al parecer son buenos amigos, y tambien del padre del diestro, el exmatador, apoderado y empresario, Justo Benítez. Antonio debería ir con una figura del torero, por sus extraordinarias condiciones.
